Aston Martin

Sin duda, la firma británica encarna el lujo y la deportividad sin estridencias, con la absoluta elegancia típica de los gentleman; no hay más que ver a un enchaquetado Pierce Brosnan –James Bond en 007: Muere otro día– a bordo de aquel Aston Martin Vanquish, enfundado en un segundo traje plateado con forma de Gran Turismo, cuyo embriagador sonido proveniente del motor V12 atmosférico –especie en peligro de extinción– de 5,9 litros dejaban entrever nada menos que sus 500 CV.