Aston Martin Vantage AMR, del circuito a tu garaje
No es habitual que un vehículo con preparación de competición salga al mercado. El Vantage AMR es uno de esos coches de carreras puros por los que los amantes de las tandas en circuito perderían la cabeza.
Más aún, si la base del coche es nada menos que la de un Aston Martin Vantage, uno de los modelos más admirados a nivel mundial por su estética, y aunque salió al mercado hace ya doce años, sigue manteniendo unas líneas de lo más atractivas y elegantes.
Vantage AMR
Para la marca era muy importante que el estreno del preparador AMR (Aston Martin Racing) con Aston Martin tuviera un comienzo arrollador. La decisión sobre qué coche iba a pasar por ellos era fácil; el Vantage ha sido todo un icono de la marca en la última década, consiguiendo un total de 25.000 ventas. La unión no puede fallar.
La marca británica quiere que AMR consiga consolidarse a nivel mundial. Algo parecido a lo que representa AMG para Mercedes o M para BMW, y por lo que hemos podido ver con el Vantage, parece que van por buen camino.
No solo tendrás un coche con el que te lo puedes pasar de cine en un circuito o que te sacará una sonrisa en cada curva, sino que además podrás disfrutar de un auténtico turismo con el que puedes afrontar grandes distancias sin acordarte de la suspensión. Es un coche que regala una comodidad impropia de vehículos de su carácter.
Con solo 300 unidades a la venta, el comprador también se asegura una dosis extra de exclusividad, y las probabilidades de que sea un modelo que se cotice al alza en el mercado de ocasión son muy altas.
El modelo, al igual que el Vantage normal, está disponible en versión coupé o roadster, y podremos equiparlo con el kit aerodinámico o sin él, dependiendo del nivel de radicalidad que queramos darle.
Dos opciones mecánicas
De esas 300 unidades a la venta del Vantage AMR, 200 se venderán con motor V12 y las otras 100 con un V8.
La variante menos potente cuenta con un bloque de ocho cilindros en uve y 4,7 litros de cilindrada, entrega una potencia de 435 CV y va montado en posición central-delantera. Toda la potencia pasa al eje trasero. Se trata del mismo motor que monta el Vantage de serie que tantas satisfacciones ha dado a la marca y a sus clientes. Entrega un par máximo de 490 Nm a 5000 rpm. Con él, el Vantage AMR es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 4,8 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 305 km/h.
Si optas por la versión más potente, disfrutarás de un auténtico V12 con seis litros de cilindrada y nada menos que 603 CV de potencia. El ruido que genera su tubo de escape es música para los oídos de los amantes de los doce cilindros.
Ambos motores van asociados a una caja de cambios secuencial de siete velocidades que puedes manejar mediante levas y, opcionalmente, se puede escoger una transmisión manual para los más puristas, de seis marchas en el V8 y siete en el V12.
Las llantas también son exclusivas para cada uno de ellos, con unas de cinco radios para el de ocho cilindros y unas diez para el más potente.
Las enormes pinzas de freno van pintadas en el mismo color que elijas la banda central que atraviesa el coche por completo. Con este mismo color, Aston Martin decorará el interior para que todo vaya a juego. Todo está cuidado al detalle en este inglés, tanto como su interminable lista de caras opciones.
El precio de la exclusividad
El Aston Martin Vantage AMR va dedicado a un público muy concreto. No solo tiene que tener dinero para adquirir capricho semejante, sino que tiene que ser un auténtico amante de la conducción y las sensaciones al volante.
El precio de partida es de 111.530 € para el del motor V8 y 169.580 € si equipa el V12, ambas con la configuración coupé. Si optamos por la carrocería descapotable el precio asciende a 122.242 € y 180.400 € para el V8 y V12, respectivamente.
Dada la sofisticación incluida por el preparador AMR, no nos parecen precios desorbitados, y menos tratándose de un vehículo que aparecerá en los libros de historia de la marca por ser el primero en pasar por las manos de Aston Martin Racing.