BMW 330e, deportividad ecológica

El nuevo BMW 330e trae bajo el brazo un planteamiento ecológico muy deportivo, aunque menos familiar de lo que nos gustaría
BMW 330e, deportividad ecológica

Escrito por Alberto Fuentes

Última actualización: 23 julio, 2020

La firma alemana ha sacado este verano la versión híbrida enchufable del BMW Serie 3, denominado BMW 330e, un modelo con pocos rivales en el mercado, pero con un enfoque un tanto distorsionado de lo que se busca con un coche ecológico. 

La generación anterior del Serie 3 ya contaba con esta versión, pero no alcanzaba la potencia de este nuevo modelo. Por otra parte, su rival más directo es el Volkswagen Passat GTE o el Mercedes Clase C 300 e, otro híbrido enchufable de altos vuelos.

Diseño exterior del BMW 330e

La estética no recibe cambios con respecto a un BMW Serie 3 convencional, lo que es una muy buena noticia, ya que cuenta con una de las imágenes más frescas del momento entre las berlinas premium.

BMW 330e, trasera.
Trasera del BMW 330e.

Para poder diferenciarlo a simple vista hay que fijarse en la ‘i’, de iPerformance, que hay en las aletas delanteras y el emblema con la palabra eDrive en el pilar C. Además, la boca de carga para el enchufe también le delata.

Por lo demás, te llevarás todo un Serie 3, con su enorme distancia entre ejes y su estilizada silueta, una berlina de corte muy deportivo pero con una elegancia muy bien encajada.

Interior

El salpicadero tampoco varía con respecto al de un Serie 3 convencional, a excepción de algún detalle, como un indicador digital en el cuadro de instrumentos que nos da la información sobre la carga de las baterías, o el botón eDrive.

Todo fluye a las mil maravillas en el interior de este BMW 330e, con una calidad de materiales muy elevada y un espacio suficiente para que cuatro adultos viajen de forma muy cómoda. Ahora bien, la forma de la banqueta trasera no ha sido diseñada pensando en un quinto ocupante, por lo que este irá un poco más incómodo.

BMW 330e, interior.
Interior del BMW 330e.

La mala noticia llega cuando abres la puerta del maletero y ves que el espacio disponible es más propio de un compacto que de una berlina de 4,71 metros de longitud, con un total de 375 litros de capacidad, 105 litros menos que las versiones no electrificadas.

Esto supone un inconveniente enorme para quien busque en este BMW 330e un vehículo familiar, y todo es debido a que los vehículos de tracción trasera como este no tienen espacio para ubicar las baterías bajo el suelo del coche, lo que obliga a introducirlas bajo el piso del maletero.

Motor del BMW 330e

La configuración mecánica del 330e está muy bien pensada, ya que cuenta con un potente motor de gasolina de 2,0 litros y 184 CV para asegurar una respuesta contundente sea cual sea la carga de las baterías.

Este motor de combustión se ve apoyado por otro eléctrico de 88 CV, que puede funcionar de forma independiente si se conduce con suavidad, o conjuntamente con el de gasolina para dar una potencia total de 252 CV, con una entrega instantánea y muy contundente al eje trasero.

En condiciones normales de circulación, la autonomía real en modo 100 % eléctrico es de unos 30 kilómetros, y el consumo es de unos 4,0 litros/100 km, una cifra muy buena pero alejada de los 1,9 litros/100 km que aventura BMW en la homologación.

Lateral del BMW 330e.
Vista lateral del impresionante BMW 330e.

Las prestaciones son las propias de una berlina con su potencia: acelera de 0 a 100 km/h en 6,1 segundos y alcanza los 225 km/h. Esto, junto con la excepcional puesta a punto del chasis del BMW 330e, hacen que sea un vehículo muy divertido de conducir, incluso con los 200 kilogramos extra que lleva con todo el sistema eléctrico.

Respecto al modelo precedente, se ha mejorado la regeneración de la energía en las frenadas y la eficiencia. Además, solo necesita tres horas para cargar a tope las baterías en un enchufe convencional.

Precio

Aquí viene el segundo gran inconveniente de este modelo. Cuesta 47 700 euros el modelo con el acabado más básico de este BMW 330e, una cifra bastante elevada para su segmento. A cambio, te asegura unas prestaciones muy dignas con el consumo de un pequeño utilitario.