
De que el Grupo FCA le ha sacado un enorme partido al Fiat 500 no cabe duda. Y es que,…
Los siniestros en el trazado alemán son mucho más caros y tienen más implicaciones más allá de los desperfectos causados en el propio vehículo
Pocos circuitos dan tanto que hablar en el mundo como el infierno verde. Cada una de sus curvas está llena de historias de proezas y desastres, aunque los accidentes en Nürburgring se están haciendo casi tan famosos como los records que baten en él las mejores marcas de deportivos.
El exceso de tráfico, manos inexpertas, el firme irregular y la falta de escapatorias provocan que este trazado sea uno de los más peligrosos del mundo, pero esta meca del mundo del motor no baja el nivel de público empeñado en buscar el límite a sus coches y pasar un buen rato quemando neumáticos.
Las salidas de vía en este circuito son mucho más habituales que en otros, y es que su longitud hace muy difícil recordar la dificultad de cada curva. Un circuito normal tiene entre tres y siete kilómetros de longitud, mucho menos que los 20,8 kilómetros de curvas de Nürburgring.
En la mayoría de ocasiones la cosa termina con un trompo inesperado y, si solo ha quedado en eso, los comisarios del circuito sacarán una bandera amarilla hasta que te recompongas y vuelvas a la pista o apartes el vehículo de la zona de peligro.
Si con nuestra salida de pista termina impactando el coche en una barrera del circuito, esta debe ser reemplazada para garantizar su capacidad de absorción, algo que nos costará lo siguiente:
Estos son los precios de los accidentes más leves. En caso de sufrir un golpe que obligue a cerrar el circuito por la entrada de asistencias el precio a pagar será de 1 666 €/hora, a lo que hay que sumar los 500 € del servicio de grúa.
Todo ello sin contar con los daños de tu propio vehículo, algo de lo que te acordarás después de abonar lo que corresponda a los dueños del circuito.
Las inmediaciones del circuito están llenas de agencias de alquiler de vehículos para que puedas dar unas vueltas por el circuito. Las condiciones entre unas y otras son muy diferentes, pero dependiendo del valor del vehículo alquilado también nos puede salir por un ojo de la cara tener accidentes en Nürburgring.
Por ejemplo, un Suzuki Swift Sport, uno de los vehículos más básicos y aconsejables para novatos, pero con el que te lo puedes pasar muy bien, suele contar con fianzas de unos 4 000 €, por lo que, en el peor de los casos, esa será la cifra máxima a pagar.
Un Audi RS3 puede subir esa cifra a 30 000 €, por lo que debemos tener en cuenta qué estamos dispuestos a perder antes de escoger un coche u otro. De los superdeportivos ya ni hablamos, pues estos pueden alcanzar los 100 000 € de fianza, algo que puede arruinar el bolsillo de más de uno.
Para evitar en la medida de lo posible el mayor número de accidentes en Nürburgring, la dirección ha establecido una serie de normas que todo el mundo debe cumplir, independientemente del coche que conduzcas:
Cumplir con estas normas es esencial si quieres que el seguro de tu coche se haga cargo de los desperfectos. Además, la dirección podrá sancionarte en caso de incumplimiento.
En todo caso, si eres un amante de la velocidad, es un destino del que debes disfrutar por lo menos una vez en la vida. Pero ten cuidado, sus 73 curvas son adictivas…