Descubre las ADAS que serán obligatorias en todos los coches nuevos
Una de las principales causas en el incremento del precio de los coches modernos es la creciente dotación de seguridad. Donde hace unos años era suficiente con pretensores en los cinturones, ABS y ESP ahora se aglutinan numerosos asistentes que nos hacen la vida más fácil, interviniendo antes de producirse un accidente para así evitarlo.
Estos son los ADAS, sistemas diseñados para prevenir accidentes (conocido como seguridad activa) y en el caso de producirse, reducir las posibles lesiones de los ocupantes del vehículo. A esto se le conoce como seguridad pasiva. Con la popularización de ciertos sistemas el coste de los mismos se reduce.
Para asegurar la proliferación de estos en todo tipo de vehículos, la Unión Europea amplía cada cierto tiempo la lista de ADAS de obligada equipación para mejorar la seguridad en las carreteras europeas. La última actualización es de este mismo 2022 y a continuación repasaremos todas las novedades.
ADAS obligatorios
Hay que tener en cuenta que el equipar estas ayudas a la conducción de forma obligatoria se realizará en dos bloques. Mientras que para vehículos de nueva homologación será obligatorio equiparlos desde ya, no será así para los ya a la venta; para estos se dará un plazo de demora de dos años para equiparlos. Es decir, entre 2022 y 2024 todos los coches comercializados contarán con los siguientes asistentes.
El primer sistema será el ISA, un limitador de velocidad inteligente a la velocidad máxima de la vía. Podrá desactivarse con tan solo un botón o en caso de llevarlo activado, al acelerar a fondo (el sistema detecta que hay una emergencia y que por eso se acelera de repente a carga máxima).
A este le siguen los detectores de fatiga y sueño y el sistema de frenada automática de emergencia. Suelen ser los asistentes más extendidos a día de hoy, pero pasarán a ser mandatorios. De igual manera, la cámara de visión trasera pasará a ser obligatoria al tener que incorporar la alerta de tráfico cruzado, muy útil a la hora de salir de un estacionamiento.
La alerta por cambio de carril involuntario de carril también pasa a la lista de equipamiento indispensable. Lo que no especifica la normativa es si la alerta debe ser visual, sonora o aptica con vibración en el volante. El método de aviso queda a elección del fabricante. Lo que se mantiene sin obligatoriedad es la corrección en la trayectoria del vehículo si no se reacciona a dichas alertas pasado un tiempo.
Para vigilar a los más pequeños la alerta de cinturón pasará a controlarse también en las plazas traseras. Hasta ahora solo era necesario para las delanteras, así como el testigo del airbag del pasajero. Lo más importante será la caja negra, una idea traída de la aviación y que registrará varios parámetros del vehículo en últimos segundos antes de un accidente.
Con la vista puesta en futuras reglamentaciones, los nuevos vehículos deberán integrar la preinstalación para un alcoholímetro. Se viene hablando de esta idea desde hace mucho tiempo, y aunque no será necesario el alcoholímetro, si lo será su preinstalación para poder adaptarse fácilmente en un futuro. Para cuando llegue a estar activo este sistema, tendrá el objetivo de bloquear el arranque si el conductor supera la tasa de alcohol permitida.
ADAS futuros
Con el proyecto denominado Vision Cero, la Unión Europea pretende salvar la vida de 25.000 personas y 140.000 heridos en 18 años, con el objetivo de que en 2050 no haya ninguna muerte en carretera. Para lograr tal objetivo no dejarán de obligar a los fabricantes a incorporar más ADAS a sus coches.
El uso de estos sistemas contribuirá notablemente en el desarrollo de la tecnología de conducción autónoma.
De esta manera, desde 2024 serán otros los ADAS a incorporar: un sistema más avanzado para la detección de peatones y ciclistas, adecuando el diseño de las carrocerías para reducir los daños causados en caso de atropello. También se incorporarán nuevos métodos de reconocimiento de distracciones al volante.
Como ocurre con todo lo mencionado en el punto anterior, existirá un plazo de dos años para montar estos sistemas en coches ya a la venta. Por lo tanto, no será hasta 2026 que todos los coches vendidos los equipen.