Este es el segundo Volkswagen Phaeton del que el Dieselgate nos privó
Volkswagen ha lanzado en las redes todo un bombazo: el Volkswagen Phaeton D2. Un prototipo funcional de pre-serie del que estaba destinado a ser el buque insignia de la marca germana.
Esta segunda generación de la berlina de lujo de Wolfsburgo iba a revolucionar el segmento F donde competía con el Mercedes Clase S, BMW Serie 7 y Audi A8, al que calcaba en muchos aspectos, pero recortaba en precio. Sin embargo, en 2016 su producción fue desestimada en pro de invertir en la electrificación de la marca, un movimiento motivado por el fraude de las emisiones –Dieselgate– descubierto en 2015.
Así pues, el lugar de vehículo halo recayó finalmente en la tercera generación del Volkswagen Touareg, presentada en 2018 y que heredaría elementos que ya muestra el Phaeton D2. A la postre la decisión fue la correcta, ya que económicamente hablando el proyecto generaría perdidas como ya lo hizo la primera generación y su sobre-ingeniería.
El prototipo casi definitivo
Escondido durante 6 años, el Volkswagen Phaeton de segunda generación ha sido desclasificado mediante una breve galería de fotos y muy poca información sobre el mismo. Todo con el motivo del 20 aniversario del lanzamiento del modelo original, en 2002. Se cumplen 2 décadas del sueño húmedo del fallecido CEO Ferdinand Piëch, una berlina de lujo.
Años de desarrollo que estaban a punto de ver la luz con un lanzamiento previsto para el mismo 2016 en el que terminó cancelándose el proyecto dejaron como resultado un prototipo funcional que a la vista de las imágenes, podría estar mañana mismo en un concesionario puesto a la venta.
Como buena berlina de representación no arriesga en su concepto, con 3 volúmenes claramente diferenciados y un diseño elegante, sin estridencias.
Se desconoce cuál es la motorización que mueve a esta unidad única, pero bien podría ser el propulsor 3.0 TDI que hace de versión de acceso el citado Touareg. Se rumorea que la oferta mecánica sería idéntica entre ambos modelos, como ya lo fue hace 20 años con los V10 TDI.
Eso sí, se ha confirmado el hecho de que en gasolina el coche estaba capacitado para montar el propulsor híbrido enchufable que mueve al actual Touareg R y como broche de oro, el mítico W12 compartido con Bentley. Este propulsor de más de 6 litros será pronto todo un dinosaurio extinto una vez la firma británica se pase a lo eléctrico.
Adelantando el futuro de la marca
Siempre se ha dicho que el estandarte de la industria es el Mercedes Clase S, una vara de medir sobre la que todos los fabricantes reflejan sus futuros modelos y tecnologías. Lo que un Clase S lleve ahora se irá popularizando en segmentos inferiores en 10 años. Algo similar ocurre en el caso del Volkswagen Phaeton.
Toda idea aplicada a la berlina alemana se irá aplicando a otros modelos de la marca con el paso del tiempo y por consiguiente, el abaratamiento de dicha tecnología. No ha sido diferente en esta ocasión. Visualmente, queda patente como la imagen de marca actual deriva directamente del diseño del Phaeton D2.
Los mismos vemos en el interior, donde el protagonismo recae sobre el Innovision Cockpit de 15 pulgadas con pantalla curva. Este sistema se ha terminado utilizando en el Touareg sin cambios aparentes, pero dos años antes habría sido el Phaeton el que lo hubiese estrenado.
El completo sistema de iluminación matricial LED también adelantaba a los más modernos sistemas que permiten alumbrar más y mejor en ópticas cada vez más delgadas pero a la vez, con una estructura interna mucho más complejas.
Una vez visto lo que ocultó Volkswagen nos queda una pregunta: ¿Qué otros proyectos quedaron en la nada?