Koenigsegg Regera, el híbrido inalcanzable
El Koenigsegg Regera entra directo en los libros de historia de la marca como el primer coche híbrido que sale de su fábrica, un modelo que no anda con medias tintas en ningún apartado y al que le cuesta encontrar rivales en pista.
Antes de nada, si estás leyendo el artículo porque quieres comprarte uno, has de saber que ya se han agotado todas las unidades que se han fabricado y no hay noticias de que se vayan a hacer más. Estamos seguros de que podrás encontrar algo que te guste por un precio similar…
Según su planteamiento mecánico, el Koenigsegg Regera cuenta con muy pocos rivales, por no decir ninguno, capaces de hacerle sombra, ya que los híbridos con mayor renombre hasta la fecha, como el Ferrari LaFerrari o el Porsche 918 Spyder, se quedan un paso por detrás, tanto en potencia como en precio.
Diseño exterior del Koenigsegg Regera
Buscar un ángulo desde el que el Koenigsegg Regera no parezca espectacular es imposible. La firma sueca es capaz de hacer vehículos tan impresionantes como un buen Lamborghini, pero sin caer en la tentación de incluir elementos absurdos o excesivamente extravagantes.
El frontal es muy Koenigsegg, con un morro relativamente pequeño en comparación con lo que hay de habitáculo hacia atrás. Esta línea la lleva defendiendo desde los inicios de la marca, característica que también se puede ver en los Pagani, y que creemos que sienta muy bien a un superdeportivo.
La relativa sencillez de sus líneas no lo hacen menos impresionante, y la boca de entrada de aire lateral no deja lugar a dudas sobre lo que hay bajo el capó. Según la marca, el Regera está más enfocado a un GT que a un deportivo al uso, cosa que no encontramos en el exterior pero sí a la hora de conducir.
La trasera es la parte que más personalidad desprende, con unas líneas que parecen diseñadas por un ingeniero de la Nasa. Las formas curvas toman protagonismo una vez pasado el pilar B, con ciertos guiños a los diseños que se llevaban en los coches de los años 50.
Por otra parte, toda esa finura queda en segundo plano cuando se despliega el enorme alerón trasero. Los diminutos pilotos y la salida de escape central ponen la guinda a uno de los diseños que más me ha gustado en mucho tiempo.
Motor del Koenigsegg Regera
Cuatro motores, uno de combustión y tres eléctricos que superan los 1500 CV de potencia. Esa es la carta de presentación de este apasionante Koenigsegg Regera, por lo que te puedes imaginar de lo que es capaz.
El motor de combustión que lleva bajo el capó es un moderno 5.0 V8 TwinTurbo gasolina que tiene como peculiaridad que no lleva una caja de cambios que se meta entre él y las ruedas.
De los otros tres eléctricos, dos de ellos actúan en las ruedas posteriores, cada uno en una, mientras que el tercero viaja a lomos del propulsor de combustión, solidario al cigüeñal para mejorar su rendimiento.
El resultado de toda esta melodía es un par máximo de 2000 Nm que hacen que pase de 0 a 100 km/h en solo 2,8 segundos y alcanzar los 450 km/h. Como curiosidad, y viendo el pique sano que hay entre el Tesla Roadster y los superdeportivos de Koenigsegg, el eléctrico es capaz de realizar el 0 a 100 km/h en menos de 2 segundos, algo a lo que el dueño de Koenigsegg quita peso al afirmar que no es relevante sobre el rendimiento del coche, pero la cifra está ahí…
En cuanto al dinamismo, la firma asegura que la puesta a punto está más enfocada al confort que en otros modelos de la marca, lo que lo hace un vehículo más utilizable y cómodo para largos trayectos. Aunque debe ser complicado poner el control de velocidad y dejarte llevar sabiendo lo tienes entre manos.
Precio
Ni teniendo los 1,9 millones de dólares que cuesta el Koenigsegg Regera te podrás hacer con uno nuevo porque las 80 unidades que se fabricaron se vendieron antes de que les diera tiempo a publicitarlo.
Con el diseño y la tecnología que trae el Regera, es carne de coleccionista, por lo que es difícil que encuentres una ganga en el mercado de segunda mano…