Kia Carens, compacto, espacioso y familiar

Analizamos el Kia Carens, un monovolumen clásico que cumple con las expectativas de un coche asiático de precio ajustado y bien actualizado al mercado
Kia Carens, compacto, espacioso y familiar

Última actualización: 14 noviembre, 2018

El Kia Carens es un hatchback de cinco puertas con posibilidad de albergar cinco o siete plazas. Algunos de sus principales rivales en el mercado son el Hyundai Matrix, Ford Grand C-MAX, el Citroën Grand C4 Picasso, el Renault Grand Scénic o el Mazda 5.

Dentro de la universalidad del fabricante surcoreano, se comercializa en Reino Unido, Estados Unidos y Australia bajo la denominación de Kia Rondo.

Diseño exterior

El diseño actual del Kia Carens es bastante equilibrado, sobrio y prácticamente pensado para no disgustar, pero con la consecuencia de tampoco conseguir enamorar a nadie. Al ser un coche familiar, ofrece un aspecto recatado, pero con líneas actuales.

Kia carens.

Su frontal expone el ya emblemático Tiger Nose en la parrilla y exhibe unos faros algo grandes y alargados que abarcan desde el frontal hasta bien entrado el capó.

La vista lateral del coche deja en evidencia que alberga un gran espacio en el interior, algo que le resta cierto atractivo por fuera. En la parte trasera el Kia Carens monta unas ópticas prominentes, una tendencia también muy de moda.

Diseño interior

Su mayor virtud es su espacioso habitáculo y tener unos niveles de acabado muy agradables, pero sin llegar a ser del segmento premium. La segunda fila de asientos está compuesta por tres butacas individuales, la tercera suma los dos extra; para disponer de la tercera deberemos desembolsar un coste añadido  de 700 euros.

Interior del Kia Carens.

El maletero del Kia Carens es llega a los 536 litros. Sin embargo, si optamos por la opción de siete plazas, se reducirá a 492 litros con apenas espacio para unas maletas pequeñas; si se abaten todos los asientos el espacio de carga llegará a los 1 650 litros.

En el tablero central del monovolumen presenta una botonera sencilla y una pantalla táctil con el sistema multimedia, pero que no es compatible con MirrorLink, Android Auto o Apple CarPlay.

En el panel de instrumentos se muestran dos medidores análogos —velocidad y revoluciones— y en medio de estos un medidor digital. Su volante incorpora algunos ajustes para funciones multimedia y demás, pero sin llegar a ser excesivos.

Sus acabados empiezan con el Basic, que monta llantas de 16 pulgadas y control de crucero, el Concept añade barras de techo y climatizador automático. El acabado Drive incluye llantas de 17 pulgadas, navegador y pantalla de 7 pulgadas, y el Emotion, que es el tope de gama, suma al equipamiento la asistencia de mantenimiento de carril.

Motorización

El Kia Carens está a la venta con una selección de motores diésel y gasolina. El bloque de gasolina está compuesto por un 1.6 GDi de 135 CV de cuatro cilindros, y sólo dispone de una caja de cambios manual. Lo que limita bastante las opciones. Para el diésel tenemos un 1.7 CRDi turbodiésel de 115 CV, asociado a un cambio manual de seis relaciones.

El tope de gama es un 1.7 CRDi con 141 CV, probablemente la opción más interesante, ya que sus consumos son de. Opcionalmente se puede incluir una caja de cambios DCT de doble embrague y siete relaciones.

Un juego de motores bastante justos pero con la potencia suficiente para ser un coche muy civilizado y con una opción más potente para viajes largos.

Diseño del Kia Carens.

Precios del Kia Carens

El rango de precios que ofrece el Carens es bastante amplio; dependiendo de la potencia, el acabado Basic puede encontrarse, aproximadamente, de 20 600 a 22.150 euros. El acabado Concept se puede encontrar desde 21 700 hasta 23 300 euros.

Por su lado el acabado Drive se puede encontrar en un rango de precios de 26 600 hasta 28 000 euros y, la versión Emotion desde 29 700 hasta unos 32 900 euros; es el más costoso e incluye la fila extra de asientos.

El equipamiento que monta es consecuente con su precio y permite disfrutar de todo lo necesario para dejar satisfecho al consumidor. Una buena baza por parte de los asiáticos.