Ford B-Max: un buen monovolumen

El Ford B-Max es un monovolumen que se ubica dentro del segmento B y que estuvo en fabricación desde el año 2012 hasta finales del año 2017.
Ford B-Max: un buen monovolumen

Última actualización: 04 marzo, 2022

El Ford B-Max es un monovolumen perteneciente al segmento B. Fue fabricado por Ford desde el año 2012 hasta finales del año 2017. Este vehículo sustituyó al Ford Fusion.
Entre los vehículos que compiten en el mismo segmento se encuentran el Citroën C3 Piccaso, el Fiat 500L, el Hyundai ix20 y el Renault Modus.

Este vehículo se presentó en el Salón del Automóvil de Ginebra del año 2011. Además, fue el primer modelo europeo de Ford en incluir un sistema informático de servicios móviles denominado “Ford SYNC”.

Ford-B-Max-lateral

La única generación del Ford B-MAX, se fabricó en la planta de Rumanía. El Ford B-Max se dejó de fabricar en septiembre del año 2017.
La razón es que no fue un modelo de mucho éxito. No obstante, al principio generó unas buenas expectativas para la marca.

Por otra parte, el sustituto del Ford B-Max fue nada menos que el nuevo Ford EcoSport.

Con el paso del tiempo, el modelo presentó ligeros cambios y modificaciones. Estas afectaron tanto al diseño como a la motorización. Así, contaba con un buen nivel de equipamiento, acabados de excelente calidad y unos motores encaminados a un bajo nivel de consumo y emisiones.

Apariencia del Ford B-Max

El último modelo del Ford B-Max, tiene unas medidas de 4,08 metros de longitud, 1,6 metros de altura y 2,6 metros de anchura total. Además, destaca por su carrocería compacta y versátil, gracias a sus puertas traseras corredizas. Para ser exactos, abiertas tienen una anchura de 1,5 metros de ancho, lo que facilita a los usuarios entrar y salir de la parte trasera.

Ford B-Max-en-la-calle

Del frontal del B-Max destacó su nueva parrilla ovalada con faros afilados. Le confieren cierto parecido con la parte frontal del Ford Fiesta. En cuanto a la parte trasera, se caracteriza por unas líneas cuadradas, aunque sin dejar de lado el semblante dinámico.

El detalle más sobresaliente del exterior del Ford Max-B son sus puertas traseras corredizas.
Se utilizó un sistema de puertas sin pilar central. En realidad, para lograr este novedoso y funcional diseño, Ford integró el pilar a las puertas. Consecuentemente, el resultado son unas puertas un tanto pesadas, pero que brindan un fácil acceso a las plazas traseras.

Diseño interior

Ford puso especial atención en los detalles de los acabados del interior. Por ello, empleó materiales y detalles de alta calidad. Por ejemplo, lleva una tapicería completa de cuero y la opción de un techo panorámico. De esta forma, se le otorgaba al habitáculo una sensación de mayor espacio.

Dentro del B-Max tenemos un tablero de diseño muy típico de la marca:

  • La parte central es de color negro brillante, con materiales acolchados en sus partes superiores.
  • El panel de mandos es de fácil alcance para el conductor. Además, cuenta con una pequeña pantalla central.
  • En la pantalla central se encuentran numerosos botones de control para manejar el sistema de infoentretenimiento.

Sus amplias y cómodas plazas delanteras dan al conductor una buena posición de control, en las plazas traseras hay suficiente espacio para las piernas de los ocupantes. Por ello, pueden viajar tres adultos cómodamente. Sin embargo, se echan de menos más compartimentos portaobjetos en estas plazas traseras.

El maletero tiene 318 litros de capacidad. Esta capacidad es ampliable gracias a los asientos traseros abatibles. Además, se puede abatir incluso el asiento del copiloto, dándole una capacidad de 1,372 litros.
No es el maletero más amplio, pero si que es versátil. También lleva un pequeño compartimento oculto en un doble fondo bajo el suelo.

Acabados y equipamiento

El Ford B-Max estuvo disponible con tres niveles distintos de equipamiento: Trend, Titanium y Titanium X.
En el nivel más básico incluye aire acondicionado, radio, volante acabado en cuero, ordenador a bordo, asistente de arranque en pendiente, bluetooth, espejos laterales y manijas del mismo color de la carrocería.

En el acabado Titanium tiene climatizador, luces LED diurnas, faros antiniebla, llantas de aleación, sensor de lluvia, marcos cromados y control de velocidad.

Para el Titanium X se incluyen las tapicerías en cuero y remates cromados en el diseño interior. De manera opcional se puede pedir con techo panorámico, cámara de visión trasera o sensores de estacionamiento delantero y trasero.

Como antes se citó el Ford B-Max fue el primer coche de Ford en agregar el sistema SYNC que le permite a sus usuarios conectar teléfonos móviles o reproductores musicales a través de Bluetooth o USB, realizar llamadas con manos libres, controlar la música y demás funciones usando comandos de voz.

La seguridad no era un problema para el B-Max, contó con siete airbags: para el conductor y pasajero delantero, laterales para tórax, airbags de cortina que ocupan toda la cabina y para las rodillas del conductor. De igual forma, en el equipamiento se puede incluir un conjunto de tecnologías y asistencias para facilitar la conducción.

Motorización

El B-MAX estuvo disponible con una gama completa de motores de gasolina:

  • 1.4 Duratec de 90 CV
  • 1.6 Duratec de 105 CV automático
  • 1.0 EcoBoost con tres niveles de potencia: 100, 125  y 140 caballos,

La versión diésel llevaba un motor 1.5 TDCI de 95 caballos. Si planeas salir de la ciudad y circular por caminos menos delicados, notaras que va algo justa de prestaciones.

Por otra parte, los motores a gasolina son todo lo que se podía esperar: buena respuesta sin ahogos y con unas condiciones de ruta similares. Su comportamiento es mejor que la versión con motor diésel.

Precios del Ford B-Max

Las versiones a gasolina podían costar los 15 200 €, en su acabado Trend, hasta los 17.400 € aproximadamente. Por otra parte, los acabados Titanium oscilaban entre 16 800 y 18.800 euros aproximadamente.
Los Titanium X a gasolina estaban entre los 21 750 y los 22 200 euros.

Ford-B-max-monovolumen

En cuanto a las versiones a diésel, se ubicaban en un rango en 17 350, 18 350 y 22 350 euros en los acabados Trend, Titanium y Titanium X respectivamente.

El Ford B-Max era un coche con una buena propuesta y un buen potencial, dependiendo de la motorización. Sin embargo, al ser cancelada su producción, solo se puede conseguir de segunda mano.

No obstante, quizá este monovolumen pueda dar paso a nuevos coches del segmento que puedan recibir la popularidad conseguida por otros modelos de la marca. Así, quizá el B-Max no sea un coche actual, pero sí podría aportar su grano de arena.