¿Cómo cambiar una rueda tras un pinchazo?
Uno de los incidentes más molestos y frecuentes de las vacaciones son los pinchazos en las ruedas. Este, es una inconveniente que nos detiene y, si no estamos preparados afrontarlo, podemos llegar a pasar un momento realmente incómodo. Por eso, todo conductor debe saber cómo cambiar una rueda tras sufrir un pinchazo.
Si contamos con las herramientas necesarias y un neumático de repuesto, será sencillo superar el escollo. Independientemente de nuestro género, podemos realizar esta tarea con relativa facilidad si el vehículo es de dimensiones normales.
Para ayudar a conductores y usuarios, a continuación dejamos algunos consejos sobre cómo cambiar una rueda, en caso de que este infortunio nos suceda en la carretera.
Revisa si tienes tus herramientas en la maleta antes de partir
La prevención anti-pinchazos se inicia incluso antes de salir. Un conductor previsor, revisa si tiene en la maleta los implementos necesarios para afrontar un imprevisto en el vehículo. Son pocas las cosas que necesitamos para realizar esta “operación de emergencia”.
Nuestro kit anti pinchazos debe tener lo siguiente: gato mecánico, chaleco reflectante, triangulo de emergencia y llave. Claro que todas estas herramientas no servirán de nada si no tenemos un neumático de repuesto.
Afortunadamente, la mayoría de los coches vienen con muchos de estos complementos ya incluidos. Por ejemplo, en ocasiones la rueda de repuesto está guardada debajo del maletero. Si no sabemos muy bien dónde se encuentra alguno de los elementos necesarios, lo recomendable es leer el manual del automóvil.
También podemos contar con el bote de espuma especial para tapar el agujero de la llanta y un pequeño compresor. Esto es en caso de que decidieras no hacer el cambio hasta llegar a una estación de servicio.
Intenta detener el coche en un lugar seguro
Si tenemos mayor seguridad será más fácil para nosotros actuar. Por ello, debemos tratar de pararnos en un lugar llano, y detener el coche en la orilla de la vía. Si a la hora de hacer la reparación podemos quedar del lado contrario de la dirección del tráfico será mucho mejor.
Cuando paramos, lo siguiente es colocar el freno de mano. Si por casualidad el coche es de tracción delantera, lo correcto es dejar una marcha puesta para evitar que las ruedas giren.
Y por supuesto, siempre debemos llevar puesto el chaleco reflectante. Una vez que salimos del coche tenemos que colocar el triángulo de emergencia. Su uso obligatorio es una disposición legal en España.
Lo siguiente es aflojar los tornillos
Antes de colocar el gato, lo aconsejable es ir aflojando los tornillos de la llanta que vamos a cambiar. Para esto utilizaremos una llave específica, herramienta que nos facilitará el desenrosque incluso si las piezas están muy apretadas.
Incluso las personas menos fuertes podrán hacer esto con un poco de ingenio. Si los brazos no nos dan, podemos utilizar los pies e ir pisando y empujando la llave hasta dar la vuelta. Esto aflojará cada tornillo, hasta que sea sencillo desenroscar usando la fuerza de los brazos.
Recordemos que algunos automóviles tienen tuercas de seguridad para prevenir los robos. Por ello, es fundamental tener a mano el dispositivo especial que se utiliza en estos casos. Añadido a esto, recordemos que solo vamos a aflojar los tornillos: si los retiramos corremos el riesgo de que la llanta se salga y el coche se desnivele hacia abajo.
Cómo cambiar una rueda: Uso del gato y encaje de la rueda
Para utilizar el gato, debemos colocarlo en los bajos del coche. Por si no lo sabias, los vehículos tienen allí pequeños puntos de anclaje, que son pequeñas hendiduras dispuestas para estas situaciones.
Solo cuando encontramos estos puntos procedemos a elevar el auto. Por lo general, la elevación se hace con la llave que utilizamos para aflojar los tornillos. Cuando tenemos la rueda levantada, podemos colocar al lado del gato el caucho de repuesto. Esto es para generar un mejor aguante.
En esta parte del proceso, retiramos los tornillos, removemos la llanta averiada y encajamos la nueva. Colocamos y apretamos los tornillos comenzando por el inferior izquierdo, luego el superior derecho y todos los demás. El objetivo: ir fijando la rueda.
Posteriormente solo debemos bajar el vehículo de forma lenta y por medio del gato. Al culminar, lo idóneo es pasar por una gasolinera a comprobar la presión de la nueva llanta. Si has memorizado todos estos pasos, ya sabes cómo cambiar una rueda.