SEAT Ateca, rivales
Rivales no le van a faltar al SEAT Ateca naciendo en una época en la que todo el mundo quiere lucir un SUV en su garaje. Prácticamente todas las marcas se han unido a esta tendencia para llevarse parte del pastel, pero es necesario algo más que unas líneas atractivas.
Como no podía ser menos, el Nissan Qashqai no deja escapar la primera plaza del ranking de ventas en lo que va de año, seguido muy de lejos por otros SUV’s de corte urbano como el Renault Captur y el Peugeot 2008. Con la mitad de ventas que el Qashqai se encuentra el Ateca, concretamente en el décimo puesto.
Hemos seleccionado los tres rivales que consideramos más directos del SEAT Ateca; la lucha está servida:
Hyundai Tucson
El coreano aterrizó en Europa en el año 2015 dejando a muchos de sus rivales con la boca abierta. Su estética era robusta y rompedora, algo que logró que enseguida se posicionase como uno de los favoritos. Además, el aprovechamiento del espacio interior está muy bien resuelto y ofrece un habitáculo muy amplio y confortable.
El maletero iguala prácticamente la capacidad al del SEAT Ateca, pero las plazas posteriores son más aptas para tres adultos por la anchura disponible. También incluye lo último en tecnología y una calidad de materiales notable, aunque quizás no llegue al nivel de nuestro protagonista.
A primera vista luce una imagen mucho más SUV que el Ateca, con una altura superior y unas formas menos deportivas. Todo eso también se nota en marcha, con unos balanceos y unas reacciones que, sin ser torpe, están lejos del buen resultado del español en este apartado.
La gama mecánica es mucho más reducida que en el SEAT, sobre todo en cuanto a motores de gasolina se refiere, con un único y anticuado representante de potencia justa y alto consumo.
A favor:
- Estética imponente.
- Espacio interior para las medidas del coche.
En contra:
- Capacidades dinámicas más justas.
- Variedad mecánica justa.
Peugeot 3008
El francés ha puesto sobre la mesa una estética rompedora y futurista, cosa que atrae como un imán a cierto tipo de público pero que echa para atrás a otros muchos. El que no arriesga no gana, y de momento no le está saliendo nada mal la jugada a este SUV, ya que ocupa una envidiable cuarta plaza en el ranking de ventas.
Poco o nada tiene que ver con el ‘peculiar’ 3008 de la generación pasada, ubicado a medio camino entre un monovolumen y un SUV. El nuevo modelo presume de una silueta 100% SUV, pero con cierto carácter deportivo en sus líneas.
Es ligeramente más largo que el Ateca (ocho centímetros), y tiene un espacio interior muy similar al español, con unas correctas plazas traseras y un maletero de 520 litros, por 510 del Ateca. Lo más llamativo es la posición de conducción, con un pequeño volante para que el cuadro de mandos sea leído por encima de él.
Este tipo de atrevimientos tan propio de las marcas francesas son de agradecer, pero lo que atrae a unos por original puede frenar a otros, aunque viendo las listas de ventas solo podemos quitarnos el sombrero con la estrategia de Peugeot.
La oferta mecánica es correcta, aunque se echa en falta algún motor de acceso que abarate un poco más el precio de partida del coche. Aun así, todos y cada uno gozan de un refinamiento de referencia en el segmento, con una relación entre prestaciones y consumo de sobresaliente.
Dinámicamente está al nivel del Ateca gracias a su ligereza y altura contenida. Se trata de un coche muy completo del que no extraña su buena aceptación.
A favor:
- Motores refinados y eficientes.
- Espacio interior y originalidad.
En contra:
- Precio ligeramente superior al del Ateca.
- Gama mecánica reducida.
Mazda CX-5
El japonés es uno de los SUV’s más atractivos del momento, con una silueta deportiva y unas líneas que reclaman ese espíritu premium que persigue. El enorme morro queda genial para la foto y para quién da prioridad a la estética este será uno de sus preferidos, pero las formas bonitas suelen ir reñidas con el espacio interior.
No es un coche poco espacioso, pero se queda ligeramente por detrás de sus rivales más directos a pesar de contar con casi 20 centímetros de longitud más que el SEAT Ateca. El maletero tiene 477 litros y las plazas posteriores cumplen pero no destacan.
La oferta mecánica es un poco reducida y parte de 150 CV de potencia, lo que le resta gran cantidad de posibles compradores. Los motores gasolina no tienen turbo y, aunque son suaves progresivos, no tienen la pegada de un motor turboalimentado.
En cuanto al diésel, existen dos niveles de potencia, de 150 y 175 CV, ambas igual de satisfactorias por potencia y refinamiento pero un poco gastones si los comparamos con los del Ateca. Las capacidades dinámicas están al nivel de los mejores del segmento, algo muy propio de Mazda.
A favor:
- Estética premium.
- Cualidades dinámicas.
En contra:
- Espacio interior poco aprovechado.
- Gama de motores reducida.