Caterham Seven 420, no apto para principiantes

Situado por encima del modelo 360, nos encontramos ante el escalón previo del máximo exponente de la firma británica –el 620– y ello ya nos catapulta de 0 a 100 km/h en solo 3,8 segundos; sin duda, el rey en los circuitos revirados contra superdeportivos cinco veces más caros
Caterham Seven 420, no apto para principiantes

Escrito por Alberto Fuentes

Última actualización: 29 marzo, 2018

El Caterham Seven 420 es el segundo modelo más potente de los siete niveles disponibles que ofrece la firma británica, solo superado por el Seven 620. Esto quiere decir que nos estamos metiendo en territorio semiprofesional, ya que manejar estos juguetes con tanta furia bajo el capó deja ser algo apto para novatos.

El 420 ya no solo es un vehículo que ofrece unas sensaciones puras, mecánicas y ágiles, sino que ahora se mete en terreno de superdeportivos de seis cifras en cuanto a aceleración se refiere. Para que nos hagamos una idea de su potencial, en la prueba de pasar de 0 a 100 km/h ridiculizaría a todo un Porsche 911 Carrera S de 420 CV, un pez gordo.

Diseño exterior del Caterham Seven 420

Poco cambia en el aspecto exterior respecto a sus hermanos de gama, por lo que mantiene las líneas clásicas y atemporales tan características de la marca británica, cosa que sus seguidores agradecen.

El frontal es la carta de presentación del coche. Con un morro fino y alargado, y unos focos redondos y elevados, transmite la sensación de estar ante un coche de carreras de mediados de siglo. En la calandra podemos observar un siete de gran formato, el emblema de la marca.

El lateral no es menos llamativo, ya que con la ausencia de puertas y el tubo de escape exterior se aleja de todo coche de producción actual; aquí no se busca perfección en el detalle, sino que todo está pensado para hacer sentir al conductor que se encuentra ante todo un coche de carreras donde la dinámica está por encima de la imagen.

Deportivo Caterham Seven 420: trasera
Vista trasera y lateral del deportivo Caterham Seven 420, en la que destacan las barras antivuelco y el sistema de escape lateral.

La trasera es la parte menos llamativa, con unas líneas rectas y simples pero con la misma personalidad que el conjunto, con tornillos a la luz, remaches… Da la sensación de que puedes repararlo tú mismo con un maletín de herramientas básico.

Diseño interior y habitabilidad

Los dos ocupantes del Caterham Seven 420 gozarán del espacio justo para poder entrar en el coche, nada más. Con una anchura tan limitada, la sensación de espacio es muy reducida y apenas puedes moverte una vez estás sentado, algo que agradecerás si decides pasar una mañana de circuito.

Para gozar de mayor espacio interior y de maletero, la marca ofrece la opción del chasis SV, con él, aumenta la longitud y la anchura del coche, por lo que es más apto para viajes largos. Si además incluimos el paquete S, tendrás un Caterham con parabrisas completo, alfombras, techo, ventanillas laterales y asientos de cuero.

Si eres de los que premia la deportividad por encima del confort, y pretendes entrar en circuito con él, el paquete R cubrirá tus necesidades; viene con arneses de cuatro puntos, diferencial de deslizamiento limitado, suspensión deportiva y otros detalles que mejoran su ligereza.

Deportivo Caterham Seven 420: interior
Austero interior del deportivo Caterham Seven 420, que cuenta con una palanca de cambios de recorridos cortos y precisos, así como un tacto totalmente mecánico.

El salpicadero no cambia, con un panel lo más sencillo posible, con esferas analógicas y botones pensandos para el mundo de la competición; son muy robustos e intuitivos, pero sin pretensiones estéticas de ningún tipo.

La palanca de cambios es de las más cortas que puedes ver hoy día y su manejo es, sencillamente, exquisito. Tan solo en Mazda MX-5 o el Toyota GT86 / Subaru BRZ se acercan a ese nivel de precisión y rapidez de accionamiento. El volante, de la firma MOMO, encaja a la perfección con las exigencias del coche y tiene un tacto 100% deportivo.

Motorización y dinámica

Cuenta con un motor Ford Duratec atmosférico de 2,0 litros y cuatro cilindros atmosférico, que entrega nada menos que 210 CV de potencia a 7 600 rpm. Ya comienza a ser una cifra considerable, pero con un peso 560 kilogramos, cifra pasa a ser brutal.

Deportivo Caterham Seven 420: motor
Vista del motor del deportivo Caterham Seven 420, de 200 CV.

La relación potencia-peso del Caterham Seven 420 es digna de vehículos de cinco veces su precio, con 375 CV por tonelada. Viendo la capacidad de tracción de Caterham, se trata de una potencia que no puedes tomar a la ligera, si pisas a fondo con el volante ligeramente cruzado el sobreviraje será inmediato.

Como puedes imaginar, las prestaciones son de infarto: pasa de 0 a 100 km/h en solo 3,8 segundos y alcanza una velocidad máxima de 219 km/h, suficiente para jugar con superdeportivos sin tener que dejarles pasar.

En carretera difícilmente podrás sacar partido a tanto potencial, pero en circuito es un coche digno de probar alguna vez si eres un auténtico fanático del mundo del motor. Sus inercias son mínimas y permite cambiar de dirección como si de un kart se tratara y, si la pista es lo suficientemente ‘ratonera’, pocos coches serán capaces de seguirte.

Deportivo Caterham Seven 420: cockpit
Vista del cockpit o puesto de conducción del Caterham Seven 420, totalmente orientado a la conducción deportiva.

La dirección es muy directa y goza de un tacto bastante ‘duro’ para sentir mejor los movimientos del coche; utilizar la palanca de cambios es adictivo, pues parece que estás manejando un fusil, con tacto metálico y la dureza justa. Eso si, pon el paquete R, y tendrá movimientos de carrocería menos predecibles que sus hermanos con menor motor.

Precio

Por 37 150 € puedes adornar tu garaje con un deportivo de raza, un precio muy económico si lo comparamos con rivales de prestaciones similares. Lo cierto es que, si eres un amante de la conducción y de los circuitos, te llevas las piezas justas para conseguir esas sensaciones.

Es un juguete para adultos, la practicidad brilla por su ausencia y no es especialmente seguro, pero conseguirá sacarte una sonrisa cada vez que gires la llave de contacto. Si eres un fanático del mundo del motor, este Caterham Seven 420 te llenará por completo, sin medias tintas. ¿Hay mejor forma de invertir el dinero que en algo que te hace feliz? No lo creemos.