Hyundai Venue 2020, el SUV más pequeño y asequible de Hyundai
Hyundai sigue ganando cuota de mercado. Sin hacer mucho ruido, año tras año le han comido la oreja a los rivales con productos muy buenos y adaptados a lo que el público reclama. El nuevo Hyundai Venue, el último SUV de la marca, completa la gama por lo bajo, y se postula como futuro éxito de ventas.
Presentado en el Salón del Automóvil de Nueva York, el Venue se posiciona como una alternativa más económica, tradicional y pequeña que el Hyundai Kona. Como este, la personalización será un pilar fundamental, al tiempo que ofrece la última tecnología para que los jóvenes estén siempre conectados.
Atractivo y a la moda
En el plano estético, el Hyundai Venue sigue los pasos de sus hermanos. El frontal queda presidido por una parrilla de grandes dimensiones y efecto tridimensional, y unos grupos ópticos divididos. Esta solución está de moda y, además del Kona, sin salir de la casa la encontramos en el Hyundai Palisade.
Es 13 centímetros más corto, 3 centímetros más estrecho y 1,5 centímetros más alto que el Hyundai Kona, de corte más deportivo.
La vista lateral es mucho más sencilla, con líneas rectas y un techo alto y poco tendido. En contraste, los marcados pasos de rueda le dan algo de volumen a un espacio sin mucha gracia. Por su parte, la zaga muestra más personalidad, con unos pilotos cuadrados y el anagrama en el portón del maletero.
El toque de color lo da el techo y las molduras en tono de contraste, aunque son opcionales.
Interior del Hyundai Venue
Pasando al habitáculo, pese a la simpleza de este, no parece barato, sino todo lo contrario. La calidad de los materiales y ajustes son excelentes, con superficies mullidas y la opción bicolor que tan bien le sienta. Destaca la pantalla táctil de 8 pulgadas, compatible con Apple CarPlay y Android Auto, y con cámara de visión trasera.
El cuadro de instrumentos es analógico, con una pantalla central a color de 3,5 pulgadas. Aquí no está a la altura de otros como el SEAT Arona y su cuadro digital, pero tampoco son coches que compitan en cuanto a precio. El climatizador automático es monozona, pero mantiene los controles físicos afortunadamente.
Si hablamos de asistentes a la conducción, el Venue viene equipado con lo último, aunque en su mayoría forma parte del equipamiento opcional: detector de colisión frontal, aviso de cambio de carril, detector de ángulo ciego, detector de fatiga y aviso de tráfico cruzado trasero, entre otras muchas cosas.
Motorización del Hyundai Venue
En primera instancia, el Hyundai Venue solo se comercializará con una única motorización de gasolina. Se trata de un bloque tetracilíndrico de 1.6 litros de la serie de motores Gamma. Con tracción delantera, podrá asociarse a un cambio manual de seis marchas o a un automático tipo CVT, aunque se desconoce cuántas velocidades tiene.
Tampoco se conocen cifras de potencia y prestaciones. Con la presentación realizada en Estados Unidos, el único dato aportado en cuanto al motor es un consumo de 33 mpg (millas por galón), el equivalente a unos 7,1 litros cada 100 kilómetros de consumo mixto. La homologación EPA americana es la que más se acerca a la realidad.
La falta de la tracción total no será un problema para condiciones de firme resbaladizo, ya que el Venue cuenta con un modo de conducción para terrenos difíciles. Este juega con el control de tracción y estabilidad para maximizar el agarre en las ruedas delanteras, una solución similar a la que utiliza Peugeot y Citroën en sus todocaminos.
Desembarco en Europa
Oficialmente no hay nada dicho sobre un posible desembarco del Hyundai Venue en Europa, y mucho menos en España. Es de esperar que esto ocurra, ya que el Venue se ha desarrollado como un producto de corte económico pero de carácter global, por lo que más allá de Corea y Estados Unidos, debería verse por otros lugares.
Sin nada confirmado, más pronto que tarde el Hyundai Venue invadirá nuestras carreteras.
Además, cabe la posibilidad de que este pequeño todocamino sea el sustituto del Hyundai i10. El urbanita de la marca es actualmente el modelo más veterano de su portfolio, a la venta desde 2013. No sería nada descabellado sustituirlo por un SUV urbano, y más con lo fuerte que ha apostado el mercado por este tipo de coches.
Para aquellos que vean este cambio con malos ojos por su aversión a los SUV, no sería una perdida dolorosa. Ahí está Mitsubishi y su Eclipse Cross, y próximamente Ford con el nuevo Puma, dos deportivos de antaño reconvertidos y que poco honor hacen a su pasado y nombre.