Aston Martin DB11, líneas que marcarán una época
Pocos modelos actuales consiguen ponerte la piel de gallina como un buen clásico de los 60. Los hay bonitos, muy bonitos, pero no tienen el carácter de los coches de antes. Esa indescifrable sensación es la que transmite el Aston Martin DB11, cuando lo tienes delante sobran las palabras.
Estética DB a un nuevo nivel
La marca inglesa ha dado un giro a sus diseños, pero sin perder la esencia que tanto éxitos les ha dado en la última década. Con esta calandra, marca de la casa, nadie puede dudar que se trata de auténtico Aston, pero su mirada ha cambiado mucho. Ahora sus focos delanteros tienen rasgos más afilados y estilizados, que proporcionan mayor sensación de dinamismo al conjunto.
El capó es otra de sus novedades más destacadas, a parte de la pronunciada curvatura que presenta y sus generosas dimensiones, esta pieza es capaz de canalizar el aire de tal manera que el DB11 puede prescindir del spoiler trasero, mejorando su estabilidad. Además, cuenta con una nueva carrocería de aluminio unida, que da mayor ligereza rigidez al coche.
La línea lateral es más imponente que la del Vantage, con unas dimensiones de 4,74 metros, es claramente más largo y estilizado que este, y luce un marco superior del techo en color aluminio que realza su silueta.
La zaga es la parte más novedosa del inglés, al prescindir de spoiler trasero, le permite seguir una línea descendente. Los pilotos traseros parece que abrazan la parte final de esa caída, quedando un resultado muy vistoso y generando una sensación tridimensional.
El Aston Martin DB11 es uno de los GT más valorados por el público, con una elegancia incomparable, pero sin perder un ápice de deportividad y las sensaciones racing que esperas de él. A la vez, es un magnífico rutero, con una comodidad de marcha digna de una gran berlina, pero con un Aston Martin bajo tu pie derecho.
Motor a nivel DB11
En su salida al mercado, el DB11 trajo consigo un propulsor V12 Twin-Turbo de 5,2 litros de cilindrada, que entrega nada menos que 608 CV de potencia. Con 700 Nm de par motor, las emociones están más que aseguradas. Pasa de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos y permite alcanzar una velocidad máxima de 322 km/h. La transmisión elegida es una automática ZF de ocho relaciones. Este motor fue el primer bloque con turbocompresor encargado de equipar a un Aston Martin de calle.
Este año, el deportivo británico ha incorporado un nuevo motor más al ya existente. Se trata de un 4,0 litros de 510 CV. Desarrollado por Mercedes-AMG, cuenta con ocho cilindros en uve y dos turbocompresores.
Aston Martin afirma que estos bloques de origen alemán han sido afinados y diseñados de forma específica para los modelos de Aston Martin. Con él, el DB11 es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 4 segundos y alcanzar los 301 km/h de velocidad punta. Unas cifras bastante cercanas al poderoso V12.
Con sus 1770 kilogramos de peso, el deportivo inglés consigue un equilibrio en curva a la altura esperada. El chasis consigue mantener a raya tal brutalidad de potencia. También tiene un reparto de pesos muy igualado entre ambos ejes, gracias a que el motor está situado en una posición más retrasada de lo habitual y la caja de cambios se aloja en la parte trasera para equilibrar el conjunto.
Cuando haces las cosas bien, solo hay que esperar
No es oro todo lo que reluce en la casa de lujo británica. El primer trimestre de este año es el primero en conseguir beneficios después de diez interminables años de pérdidas económicas. Obviamente, la falta de renovación de sus vehículos y las demoras en los nuevos lanzamientos pasan factura.
El causante de este cambio de tendencia económica no es otro que la gran aceptación que ha tenido el DB11 por parte del público. El coche ha enamorado al mundo, y sus ventas se han disparado, sacando a la compañía de los temidos números rojos.
El precio de tenerlo todo
Un superdeportivo con un diseño envidiado por la mayoría de sus rivales, con acabados de lujo, y unas cualidades dinámicas de infarto, no puede ser barato. Pero si echas un ojo a lo que los amigos de Maranello piden por sus cavallinos rampantes, la cosa empieza a coger color y sentido. Pareciendo, desde nuestro punto de vista, un precio contenido.
El modelo con el motor V8 de origen Mercedes está disponible desde 183.000 €, y si optamos por el
V12, ascendemos un escalón hasta los 208.900 €.
Las ventas no mienten, este Aston Martin es una obra maestra, lo mires por donde lo mires. ¿Será el resurgir de una marca legendaria? Visto lo visto en la última década, parece que la elegancia inglesa vuelve a estar de moda.
