McLaren Senna, el deportivo matriculable más extremo de Woking
McLaren tenía hasta hace poco al P1, un deportivo halo situado en la gama Ultimate Series que tras el cese de su comercialización buscaba sustituto que ya está entre nosotros. Se hace llamar McLaren Senna, y llega con la etiqueta de ser el coche matriculable más extremo salido de la factoría de Woking.
Su nombre no es baladí, sino que homenajea los grandes éxitos cosechados por Ayrton Senna cuando militaba en las filas del equipo de Woking a finales de los ochenta e inicios de los noventa. Es una oda a la deportividad y agresividad, cualidades de la que hacía gala el tricampeón del mundo de Fórmula 1 cuando estaba al volante.
Aerodinámica en cada detalle
No cabe duda de que este deportivo parte de la base del nuevo 720S. A partir de ahí todo es nuevo y más, ya que el limpio y cuidado diseño de este deja paso a un extremismo dominado por completo por la aerodinámica. Este elemento ha influenciado cada apéndice y superficie de la carrocería, con un resultado muy llamativo.
“Un coche de carreras matriculable” dice la marca, y no es para menos. El coche llama la atención por su prominente alerón trasero activo y las enormes entradas de refrigeración repartidas por todo el vehículo. Llamativo también es el splitter frontal, que imaginamos no habrá sido fácil de homologar para calle.
Toda la carrocería ha sido realizada en fibra de carbono, mientras que el techo es de cristal, mismo material que podemos encontrar en las puertas de forma opcional.
La importancia de la aerodinámica ha sido algo crucial en el desarrollo del McLaren Senna, hasta el punto que los faros y pilotos han quedado relegados a un segundo plano. Incluso se ha añadido una toma de aire central en el techo para refrigerar el motor, solución tomada también por Mercedes en el caso del Project-One.
El conjunto queda rematado por un difusor muy trabajado en sus formas, así como una salida de escape triple situada en la tapa motor. A pesar de todas las florituras con las que cuenta, solo marca 1 198 kilos en la báscula, 220 kilos menos que el McLaren 720S del que deriva.
Fibra de carbono por doquier
Si pasamos al habitáculo destaca la ausencia de equipamiento enfocado al lujo y la comodidad. Es casi como ver el interior de un coche de competición. Todo está realizado en fibra de carbono, cuero y alcántara, y los botones se han reducido al máximo.
La reducción de elementos superfluos ha sido tal que solo se han mantenido del 720S el cuadro digital escamoteable y la pantalla central. Eso sí, esta última ha modificado su posición, al igual que los controles del resto de funciones del vehículo para un uso más intuitivo y sencillo.
McLaren Senna Carbon Theme by MSO
Un producto tan especial como es el McLaren Senna no podía mantenerse ajeno al departamento de operaciones especiales de la firma. Gracias al buen hacer de los ingenieros y artesanos, han desarrollado el primero de las cinco unidades que se distinguirán por la carrocería vestida de fibra de carbono vista con pequeñas notas de color.
La unidad en cuestión aumenta la presencia de referencias a Ayrton Senna. Al nombre se suman las piezas en color amarillo Solar Yellow y las pinzas de los frenos carbocerámicos en verde Lauren Green. Para quien no lo sepa, estos eran los colores del casco del talentoso piloto de Fórmula 1 brasileño.
El trabajo realizado en la fibra de carbono ha llevado 1 000 horas según la marca, a las que hay que sumar otras 250 horas por los detalles en color. Además, se han incluido unas llantas de nuevo diseño un 10% más ligeras, compuestas por fibra de carbono y aluminio forjado.
El habitáculo también ha recibido ciertos toques de color al igual que el exterior. Las costuras en contraste y ciertas molduras van ahora decoradas en el mismo amarillo y verde visto en la carrocería.
Prestaciones
El grupo propulsor ha sido uno de los aspecto modificados en este superdeportivo tan peculiar. Equipa el mismo motor V8 4.0 del McLaren 720S, que en esta ocasión aumenta sus cifras hasta los 800 CV de potencia y 800 Nm de par máximo. Toda esta potencia es transmitida únicamente a las ruedas traseras a través de un cambio de doble embrague y siete relaciones.
El McLaren Senna se toma 2,8 segundos en acelerar de 0 a 100 km/h y alcanza una velocidad punta de 340 km/h. Ahí es nada.
Con la vista puesta en dar al conductor el mayor control posible, cuenta con el Race Active Chassis Control II y una suspensión hidráulica. Con estos elementos se puede elegir entre cuatro modos de conducción –Comfort, Sport, Track y Race– que modifican el comportamiento del motor, suspensión y chasis.
Destacar que la gran complejidad aerodinámica que exhibe su carrocería arroja el siguiente dato: puede generar hasta 800 kg de carga aerodinámica a máxima velocidad. Para controlar un coche con un rendimiento de coche de carreras se ha optado por equipar frenos carbocerámicos de grandes dimensiones y neumáticos Pirelli P Zero Trofeo R.
Precio
La producción del McLaren Senna estará limitada a 500 unidades. Cada una de ellas partirá de las 750 000 libras, lo que al cambio suponen entorno a 850 000 euros sin tener en cuenta los impuestos. Lo que si se puede asegurar es que ninguna de las unidades producidas tendrá ese coste, ya que los clientes cuentan con un departamento de personalización exclusivo, MSO.
Datos McLaren Senna
- 2 puertas
- 2 plazas
- Tracción trasera
- Motor V8 4.0 de 800 CV de potencia y 800 Nm de par
- Consumo y emisiones: desde 7,4 l/100 km y 250 g/km de CO2
- Cambio automática de 7 velocidades de doble embrague
- Precio: desde 850 000 euros (impuestos no incluidos)