Reinterpretación eléctrica para resucitar al Volkswagen Buggy
El Volkswagen Buggy volverá a ver la luz próximamente. Y lo hará con una reinterpretación eléctrica inspirada en los clásicos buggies de los 60 y los 70. Ya hay fotos que dejan entrever un prototipo que previsiblemente será bastante fiel al modelo que acabará comercializándose.
Este nuevo juguete del Grupo Volkswagen promete gran diversión en terrenos tan complicados como las dunas de arena. Ya viene avisando de sus intenciones para hacerte disfrutar con los neumáticos off-road que equipa el prototipo. Si bien se trata de un vehículo de tracción trasera, será posible equipar un motor adicional en el eje delantero para convertirlo en 4×4.
Solo con el motor trasero, entregará 150 kW o 204 CV. El Volkswagen Buggy estará ensamblado sobre la plataforma modular eléctrica MEB, lo que revela la polivalencia y versatilidad de una base que utilizará el gigante alemán para sus vehículos eléctricos. Lo bueno es que esta plataforma se adapta precisamente a un modelo destinado al ocio y cuyo volumen de ventas será más bien bajo.
El Volkswagen Buggy será presentado en el Salón de Ginebra, que se celebra del 7 al 17 de marzo, una espera que se antoja larga para los aficionados a esta clase de vehículos de recreo.
Eso sí, esta reinterpretación eléctrica –con la ventaja de una gran eficiencia– del Volkswagen Buggy respeta perfectamente el concepto de lo que son, valga la redundancia, los vehículos buggies. Estos carecen de techo o puertas, y presentan alféizares laterales abiertos: afortunadamente, el interior del Volkswagen Buggy está hecho de materiales impermeables.
En este sentido se ha pronunciado Klaus Bischoff, el diseñador jefe de Volkswagen: “Un buggy es más que un coche. Es vitalidad y energía sobre cuatro ruedas. Estos atributos se materializan en el nuevo e-buggy, que demuestra por una parte el aspecto que puede tener una reinterpretación moderna y no retro de un clásico, y por otra el vínculo emocional que puede crear la movilidad eléctrica“.
La sensación de libertad en el Volkswagen Buggy es todavía mayor que en los descapotables normales de producción. Y, aunque en principio se trata de un biplaza, será posible configurarlo como un 2+2. La carrocería es independiente del chasis –se pueden separar– y está hecha de una mezcla de plásticos, aluminio y acero.
Precedentes históricos del Volkswagen Buggy
En su momento, se aprovechó el chasis del histórico Volkswagen Beetle como base de estos vehículos que entraron de lleno en los 60 y los 70 en el mercado estadounidense, concretamente en California. Hasta los 80 se construyeron unas 250 000 unidades del antiguo Volkswagen Buggy.