Ford, el inicio de una era automotriz
La historia de Ford como fabricante de coches se inició en el año 1903, con un presupuesto de 28 000 dólares aportados por los inversores. Entre ellos se encontraba Henry Ford, quien poseía un 25,5 % de las acciones y ostentaba el cargo de vicepresidente e ingeniero jefe. Por esa época solo se producían unos cuantos coches diarios, todos provenientes de su fábrica ubicada en Detroit, Míchigan.
Primeros años de construcción
En el año 1908, la empresa lanza el modelo Ford T, el primer automóvil creado en serie y a un precio asequible para las masas; tuvo tanto éxito que la compañía se vio obligada a trasladarse a una nueva sede para poder satisfacer las demandas de producción.
Ya en 1913 la compañía desarrolló las técnicas de producción en masa, y Henry Ford creó la primera línea de producción en cadena del mundo, reduciendo el tiempo de ensamblaje del chasis de 12 horas a 100 minutos.
Fue en 1919 cuando Henry Ford se hizo con el control total de la compañía, y ese mismo año, Elsed Ford asumió la presidencia y trató de mantener los bajos costes utilizando procesos de ingeniería eficientes. En febrero de 1922, adquiere la Lincoln Motor Company, esperando introducirse en la competencia de modelos de lujo.
En 1927 cesa la producción del modelo Ford T, tras generar más de 15 millones de ventas. Después, las fábricas de todo Estados Unidos cerraron de manera temporal durante seis meses. Era el momento de la creación del Ford Modelo A, que trajo a la compañía tanto éxito como su predecesor.
Para 1935 Ford presenta una serie de coches llamados V8, los cuales estaban compuestos principalmente por un motor V8: contando con un bloque de motor de una sola pieza, 65 CV. El primer coche lanzado en esta variedad fue el Ford 48.
En 1938 se inicia la producción del Mercury, también con motores V8, propuestos para ocupar el segmento intermedio entre los Ford más populares y los lujosos Lincoln.
Ford durante la II Guerra Mundial
Al iniciar la II guerra mundial, la empresa se vio obligada a prestar ayuda en las tareas militares, a pesar de que Henry Ford era pacifista declarado. Por este hándicap, en 1942 se paró la producción en la manufactura de coches civiles.
Ford ayudó tanto a los aliados como a los alemanes (la admiración entre Adolf Hitler y Henry Ford era mutua), y produjo en menos de tres años unos 8 600 bombarderos B-24 ‘Liberator‘, 57 000 propulsores de avión, más de un millón de tanques y maquinaria bélica de todo índole.
En 1943, Henry Ford retomó el control de la compañía tras la muerte de su hijo; aunque en 1945 le cedería su puesto a su nieto, Henry Ford II. Dos años más tarde Henry Ford padre murió, el 7 de abril de 1947, a los 83 años de edad. Al finalizar la guerra, la compañía se mantuvo en ligera estabilidad.
A mediados de los años 50, la compañía lanzó el modelo Thunderbird, un descapotable biplaza de lujo, el que recibió más de 3 500 peticiones en lo primeros diez días. Se había acordado construir unas 10 000 unidades, pero en 1955 las ventas llegaron a 16 150 unidades.
En 1956 se creó una subsidiaria de Ford Motor Company llamada Aeronutrinics Systems, donde se fabricaban armas de defensa y tecnología aeroespacial. Al llegar los años 60 Henry Ford II renunció a la presidencia, para convertirse en CEO, y Robert McNamara asumió el cargo.
Nacimiento del Ford Mustang
La compañía sufrió la primera huelga general de toda su historia, con Jhon Dykstra como presidente. A pesar de ello, en 1964 ve la luz el primer Ford Mustang, y ya en su primer día de producción recibió más de 20 000 pedidos.
Tras el éxito del Mustang, la expansión de la compañía trae consigo la creación de 44 plantas de fabricación, 18 plantas de montaje, 32 almacenes de piezas, 2 campos de pruebas y 13 instalaciones de investigación e ingeniería en todo Estados Unidos.
En 1971 la empresa se convierte en el número uno en ventas, y ya en q976 aparece el Ford Fiesta, un coche que se convertiría en un icono de la marca. En los inicios de los años 80, y debido al alto coste del petróleo, Ford lanza su modelo Escort, ideado como un coche de bajo consumo.
En 1985 sale a la venta el Taurus, un turismo que fue vendido en casi todo el mundo; dos años más tarde, la marca supera en ganancias a la General Motors por primera vez.
Después, ya en 1990 adquirió a Jaguar por 2 500 millones de dólares. Fue la época del primer Explorer, un vehículo todoterreno que rompió récords de ventas en todo el mundo, con más 200 000 despachadas.
La Ford compró un 50% de Mazda en el año 1992, y más adelante inició la producción y venta de coches con la firma de Ford en China, pero al llegar el nuevo milenio algunos contratiempos frenaron la expansión de la empresa.
Era actual
En el 2005 con la caída del valor de sus bonos, el presidente Bill Ford desarrolló un plan para aumentar la rentabilidad de la empresa, en el que se incluye un cambio de gran magnitud: dejan de fabricar modelos no rentables o ineficientes, refuerzan las líneas de producción y deciden prescindir de 14 fábricas.
En la actualidad, Ford es uno de los más grandes productores de vehículos en el mundo, y el aparente secreto de la compañía reside en la visión, la persistencia y sus valores irrompibles.
A pesar de los inconvenientes, Ford siempre trató y logró alcanzar las metas propuestas en su momento, y lo sigue haciendo a día de hoy; ofrece las gamas más variadas de coches y con una calidad y fiabilidad indiscutibles. ¡Tener un Ford es tener un trozo de historia entre las manos!