¿Cómo recurrir una multa de zona azul?
La multa es un pago que se puede evitar, interponiendo un recurso de reposición en un plazo no mayor a un mes. ¿Cómo recurrir una multa de zona azul? Lo primero es que se demuestre que el conductor cometió la infracción y esta prueba lleva su tiempo.
Recomendaciones para evitar multas en la zona azul
Las zonas azules son aquellas destinadas por el ayuntamiento al cobro por estacionar en vías públicas. Es una regulación que obliga al pago, dependiendo del tiempo que el vehículo permanezca aparcado en zonas escogidas para ello; hay otros factores que se tienen en cuenta, como si se el vehículo es residente o visitante.
La razón que fue base para las instaurar zonas azules es la de impulsar la rotación de vehículos, para que todos tengan más posibilidades; en teoría, se facilita que haya un mayor número de plazas libres para estacionar.
El Servicio de Estacionamiento Regulado se estableció inicialmente en el centro de ciudades como Madrid, Barcelona, Sevilla; después se fue extendiendo a gran parte de las ciudades y pueblos de España. Su costo es elevado en algunos casos, y el tiempo de permanencia limitado
¿Impuesto de circulación o zonas azules?
Ambos hay que pagarlos. Tanto el impuesto de circulación como el cobro por aparcamiento en las zonas azules tienen un costo; este impuesto no tiene nada que ver con el pago por estacionar, que además se hace a una empresa privada. Lo que se pueden recurrir son las multas por este último concepto
¿Cómo evitar la multa de zona azul?
Quienes no retiren el ticket que ofrece el parquímetro, no paguen la tarifa o excedan el tiempo indicado, recibirán la desagradable notificación. Lo recomendable, en principio, es no incurrir en ninguna de estas causales para evitar la multa.
Si ya la notificación llegó al limpiaparabrisas del vehículo, hay opciones a tomar para recurrir una multa de zona azul. Hay quienes deciden no hacerlo para evitar contratiempos o acogerse al pronto pago; en algunos casos puede ser preferible pagar tres euros para evitar la multa; pero hay otras opciones.
Multas de zona azul: ¿legales?
Desde su puesta en vigencia, la legalidad de estas multas ha sido cuestionada y son varias son las razones. En principio, quienes imponen la multa no tienen competencia sancionadora. Son trabajadores de empresas privadas contratadas por los ayuntamientos, para detectar posibles infracciones.
En consecuencia, los papeles que dejan los agentes de la ORA o controladores de parquímetros, no son redactados por entes judiciales o administrativos; carecen de valor y de la obligada presunción de veracidad.
Notificación sin valor legal
Lo que estos controladores hacen es notificar que se puede haber cometido una infracción. La autoridad será la que decida si realmente hubo infracción y qué sanción se ha de imponer.
Unos días después de recibir esa denuncia llegará una notificación por correo ordinario o no certificado. En principio, no ha sido emitida por un organismo calificado y carece de validez. A no ser que la denuncia llegue directamente de la Dirección General de Tráfico, porque haya acuerdos con la empresa de la zona azul.
El acuerdo administrativo sancionador llegará a la vivienda del usuario días después como una denuncia formal; a partir de ahí se inicia el proceso para recurrir una multa de zona azul.
Los pasos para las alegaciones o descargos son los mismos que para cualquier sanción por infracciones de tráfico. En Internet pueden conseguirse las plantillas para redactar estos textos que acompañarán el recurso.
Verificar la veracidad
Lo primero es estudiar el caso, verificar si todo lo contenido en la denuncia se ajusta a la realidad. Cualquier imprecisión en la fecha, el lugar, los datos del conductor y del vehículo son puntos a favor del recurrente.
En el reverso del papel dejado en el limpiaparabrisas están las instrucciones a seguir. También hay una dirección postal a la que enviar el recurso para recurrir la multa de zona azul; otra opción es entregarlo en cualquier oficina de correos para ser remitido a la institución competente.
Inocente hasta que el agente demuestre lo contrario
El agente SER debe tener pruebas que avalen la denuncia o podría vulnerar la presunción de inocencia. Este empleado del Servicio de Estacionamiento Regulado carece de la presunción de veracidad que tiene, por ejemplo, un policía. Por ello, deberá demostrar que la persona multada cometió una infracción.
El recurso de reposición debe tramitarse antes del mes de haber recibido la denuncia de parte del agente SER, o de lo contrario no prosperará. Recurrir una multa de zona azul podría ahorrar hasta 90 euros, dependiendo de la zona donde se señale que se cometió la infracción.