Volkswagen e-Golf eléctrico
Analizamos las caracerísticas del Volkswagen e-Golf eléctrico. Este modelo de fabricación y diseño alemán no deja indiferente a nadie. Se trata de un compacto completamente eléctrico y con una generosa autonomía.
El exterior del Volkswagen e-Golf eléctrico
Como hemos comentado, el e-Golf no es ningún híbrido, como sí ocurre en otros modelos de la marca alemana, sino que se trata de un coche eléctrico puro. Está alimentado por una batería de 35,8 kWh que certifica, según el ciclo NEDC, una autonomía de hasta 300 kilómetros.
Esto, para empezar, ya se acerca a una cifra que para muchas personas resultaría más que suficiente para desplazarse al trabajo en el día a día. Por lo tanto, el Volkswagen e-Golf es algo más que una alternativa para un segundo coche.
Lo mejor del e-Golf es que no parece un coche eléctrico. Si bien es cierto que este año la tendencia de hacer coches eléctricos con un diseño discutible ha empezado a cambiar, durante mucho tiempo los fabricantes nos habían acostumbrado a que el concepto de coche eléctrico equivalía necesariamente a un coche pequeño, con formas extrañas y, en resumen, con un diseño horrible.
El Volkswagen e-Golf es como el Golf de toda la vida, pero en eléctrico. Solo el diseño de las llantas con esa forma para mejorar la aerodinámica –que son necesarias por muy discutible que sea su aspecto– y alguna que otra insignia adherida a la carrocería, nos revelan que, en realidad, estamos ante un coche que no necesita ni un solo litro de combustible para poder moverse.
El interior del Volkswagen e-Golf eléctrico
Cuando te pones a los mandos de un e-Golf, te estás subiendo a bordo de un vehículo que consume mucho menos en ciudad que en carretera. Además, te estás subiendo en un coche en el que, una vez estés en marcha, lo único que vas a escuchar es la rodadura de los neumáticos.
Por evidente que parezca, no hay que olvidar que te estás poniendo a los mandos de un coche que no se puede ‘repostar’ en una visita de un minuto a la gasolinera.
En el habitáculo, el e-Golf comparte las mismas tecnologías de navegador que otros modelos como el Passat, e incorpora en su interior el sistema de Discover Pro encabezado por una pantalla táctil de 9,2 pulgadas. Detrás del volante, lo que tenemos es un cuadro de instrumentos 100% digital, que se puede personalizar para que muestre una u otra información en su panel.
En el cuadro de instrumentos, la personalización que tenemos a nuestra disposición desde los botones del volante incluye la opción de cambiar la información que se muestra dentro del salpicadero.
Podemos, por ejemplo, ver en todo momento nuestra media de consumo en el reloj de la izquierda y la autonomía restante en el reloj de la derecha. Si queremos, podemos activar el mapa para que se muestre entre los dos relojes de los instrumentos.
Por la parte del navegador, estamos hablando de una pantalla táctil que en este nuevo e-Golf estrena la función de los controles gestuales. En lugar de tener que pulsar la pantalla para cambiar la emisora de la radio, podemos realizar esta acción pasando la mano de un lado a otro por delante del navegador.
La mecánica del Volkswagen e-Golf eléctrico
En lo referente a la propulsión eléctrica del e-Golf, todo depende del enchufe. El cable de toda la vida lo podemos descartar salvo que se trae de una verdadera situación de emergencia, ya que en un coche como el e-Golf necesitaríamos más de 15 horas para tener la batería cargada por completo.
Si utilizamos una wallbox, como la que podemos tener en nuestra plaza de garaje, con una configuración de 7,2 kW no deberíamos tener problemas para cargar la batería al 80% en poco más de cuatro horas.
Lo que realmente se echa de menos a día de hoy en esto de los coches con motor eléctrico son los cargadores rápidos. Sería una maravilla poder llegar a un centro comercial, dejar el coche enchufado a la corriente mientras hacemos la compra y volver a casa con la batería cargada al 70, 80 o 90% tras poco más de media hora de carga.
El precio del Volkswagen e-Golf eléctrico
Para concluir, el precio con el que podemos encontrar el e-Golf, incluido impuestos y el descuento oficial de la marca, se fija en 38 435 euros. Como ocurre con otros modelos eléctricos del momento, el precio sigue siendo bastante elevado para un vehículo de estas características.