¡Sorpresa! El nuevo Toyota Prius llega más atractivo que nunca
Tras una poca exitosa cuarta generación cara y sin licencia para usarse de taxi, el Toyota Prius hace borrón y cuenta nueva con una quinta entrega de los más tractiva y llamativa. Con un look muy cercano al de un eléctrico que rompe con lo visto anteriormente, y el motor más potente montado en un Prius, el pionero de la hibridación quiere recuperar su corona.
25 años han pasado desde que Toyota asombrase al mundo con la primera generación del Toyota Prius. Los japoneses demostraban así que un vehículo híbrido era viable y sobretodo fiable. Más de 5 millones de unidades después el Prius renace dispuesto a continuar con la leyenda.
A nuestro mercado llegará limitado a una super frugal variante híbrida enchufable, que si bien mantendrá el precio algo elevado, apunta a ser el futuro más inmediato en plena transición hacia lo eléctrico. Se monta sobre la segunda generación de la plataforma TNGA para vehículos híbridos.
El mejor Prius en lo estético
A nivel estético estamos ante el mejor Prius de todos los tiempos. Ahora combina a la perfección esa imagen moderna y futurista, con toques de deportividad y limpieza visual. Atrás han quedado esos diseños recargados con líneas que no casaban entre si. La nueva imagen de marca estrenada por la gama bZ es todo un acierto.
Más largo, ancho y bajo que el modelo previo, el nuevo Prius luce una imagen mucho más proporcionada aún con la su silueta tan característica. Además de las nuevas cotas, el uso de llantas de 19 pulgadas ayudan a mejorar la apariencia visual, algo a lo que las diminutas ruedas usadas hasta ahora no ayudaban para nada.
El complejo frontal anterior ahora queda esculpido por una sencilla boca inferior y unas ópticas fusionadas en la parrilla superior formando un boomerang. El ángulo del capó tiene continuidad con el parabrisas hasta que empieza a caer pasado el pilar B hasta la zaga. Sorprenden los detalles como los tiradores traseros ocultos en el pilar B, simulando ser un tres puertas.
La zaga también es más sencilla, con una boca de carga más alta y unas ópticas sencillas y horizontales como es tendencia en la industria. Mantiene la forma de huevo tan aerodinámica que estrenó la segunda generación, pero desecha la luneta trasera dividida por el alerón, volviéndose más tradicional en este aspecto.
Revolución también en el interior
Por dentro también sigue los pasos ya mostrados por el Toyota bZ4X eléctrico, con un reparto de los mandos mucho más tradicional y semejante al resto de modelos comercializados. Fuera quedan los plásticos blanco brillante y el diminuto selector del cambio que tantas risas ha generado.
Estrena una imagen mucho más sencilla, minimalista y horizontal, con controles físicos para toda la climatización y una gran pantalla de 12,3 pulgadas presidiendo el habitáculo con el último sistema de infoentretenimiento de la marca.
La instrumentación en cambio parece tomar el camino de Peugeot, con un panel de menor tamaño y situado por encima del volante. Sobre este panel se mostrarán los avisos y alertas generados por las asistencias a la conducción, para los cuales se mostrará un patrón de colores identificativo.
Solo PHEV para Europa
La quinta generación del híbrido por excelencia cambia de corazón. Evoluciona el concepto de híbrido enchufable que estrenó su predecesor y será el único tipo de motorización disponible en nuestro mercado. Así pues, se beneficiará de la etiqueta medioambiental CERO que se otorga a eléctricos e híbridos enchufables.
Esta variante PHEV (Plug-in Hybrid Electric Vehicle) combina un motor de 2.0 litros gasolina de 148 CV con un motor eléctrico de 160 CV. La potencia conjunta no es la suma de ambas, quedándose en 223 CV totales. La marca asegura un registro de aceleración de 0-100 km/h en 6,7 segundos.
La nueva batería tiene 13,6 kWh de capacidad y se sitúa bajo el piso del habitáculo. Gracias al uso de nuevas celdas de mayor densidad energética, la autonomía en modo 100% eléctrico aumenta hasta los 75 kilómetros. Además, se podrá equipar un novedoso techo con panel solar capaz de recuperar energía para alimentar los sistemas eléctricos del coche y aportar hasta 1.250 km extras de autonomía al año, de media.
En otros mercados donde la legislación no es tan exigente como en Europa se comercializarán dos variantes híbridas convencionales con motores de 1.8 y 2.0 litros. Básicamente son los motores del Toyota Corolla bajo el cuerpo del nuevo Prius.