Hyundai Ioniq Eléctrico, actualización con mayor autonomía
La movilidad eléctrica, cada vez más, cobra importancia en la línea de trabajo de las marcas europeas, japonesas e, incluso, coreanas. No hay más que ver cómo el Hyundai Ioniq Eléctrico –que tiene hermanos híbrido e híbrido enchufable– recibe mejoras a nivel de autonomía, conectividad y diseño. Este complementa la gama eléctrica de la firma asiática, en la que se incluye el Hyundai Nexo, muy especial por su propulsión por pila de combustible de hidrógeno.
Diseño del Hyundai Ioniq Eléctrico
El frontal de este eléctrico cuenta con una parrilla cerrada pero que ahora presenta un contorno que disimula ligeramente la ausencia del motor de combustión. También dispone de un paragolpes delantero rediseñado, con moldura de color plateado en la parte baja.
El parachoques trasero, por su parte, incluye molduras en color antracita. Además, para mejorar la seguridad son de LED las luces diurnas, los faros delanteros y los pilotos traseros.
Las llantas de 16 pulgadas también han sido rediseñadas.
Conectividad y equipamiento
El Hyundai Ioniq Eléctrico emplea un sistema de conectividad que permite a conductores controlar a distancia el cierre y la apertura, así como manipular el aire acondicionado y la carga de las baterías, mediante el uso de una aplicación en el móvil.
También se introduce la función eCall, por la que se avisa automáticamente a los servicios de emergencia si saltan los airbags o si se presiona el botón de llamada ubicado sobre el espejo retrovisor.
Si se opta por el sistema de navegación con pantalla de 10,25 pulgadas, los conductores reciben una suscripción gratuita de cinco años con funciones como el Multi-Bluetooth –que permite conectar dos teléfonos al mismo tiempo para escuchar música en cada uno de ellos–, reconocimiento por voz, acceso a información actualizada sobre el tráfico, radares, aparcamientos y estaciones de carga más próximas.
En cuanto al equipamiento relativo a la seguridad activa, el Hyundai Ioniq Eléctrico cuenta de serie con una amplia batería de elementos:
- Asistente de colisión frontal con detección de peatones y ciclistas.
- Advertencia de fatiga del conductor.
- Asistente de mantenimiento de carril.
- Asistente de luces largas.
En cuanto a las ayudas opcionales destacan las siguientes:
- Asistente de seguimiento de carril.
- Advertencia inteligente del límite de velocidad y de prohibición de adelantamiento.
- Alerta de arranque del vehículo precedente.
- Detector de ángulo muerto.
- Advertencia de colisión de tráfico cruzado trasero.
Sistema de propulsión del Hyundai Ioniq Eléctrico
El motor eléctrico de este Hyundai ofrece prestaciones de sobra para un usuario medio. Más allá de que 136 CV puedan no parecer gran cosa, con una entrega inmediata de par de 295 Nm la respuesta es contundente, y es que es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 9,9 segundos, un dato aceptable.
La batería de este eléctrico pasa de 28 kWh a 38 kWh; mejora en un 36 % la capacidad de almacenamiento para una autonomía de hasta 311 kilómetros según el ciclo de homologación WLTP. El cargador de a bordo pasa de los 6,6 kW hasta los 7,2 kW para una mayor velocidad de recarga; en una estación de carga rápida de 100 kW, la batería puede recuperar el 80 % de su nivel en 54 minutos.
A los modos de conducción Eco, Confort y Sport se une el Eco+, que reduce el consumo de energía por si acaso.
Además, el Hyundai Ioniq Eléctrico cuenta con tecnología de frenada regenerativa, por la que se puede hacer conducción con un solo pedal. Es decir, el freno motor es tal, que solo hace falta accionar la leva izquierda –y no el freno de servicio– para detener el coche. Con la frenada regenerativa inteligente se ajusta automáticamente el nivel de recuperación dependiendo de la inclinación de la carretera y el tráfico.
Precio del Hyundai Ioniq Eléctrico
Por desgracia, y como suele pasar con otros eléctricos, el precio sigue siendo bastante elevado. Y es que si queremos tener uno en el garaje tendremos que desembolsar al menos 36 775 euros. Al menos contaremos con la interesante garantía de 5 años sin límite de kilometraje.
Y lo bueno es que el coste de mantenimiento por su simplicidad es bajo, así como el precio por kilómetro recorrido y el hecho de que tenga una de las etiquetas medioambientales de la DGT que permiten circular por el centro de grandes capitales durante episodios de alta contaminación, que es el distintivo Zero.