Mazda 2, el pequeño japonés se renueva
Nacido en 2015, el Mazda 2 entra a competir en el segmento más feroz de todos: los utilitarios, también llamados segmento B.
La marca japonesa aporta características a su utilitario que no hace ninguno de sus competidores, los cuales se han dejado poseer por el creciente downsizing: motores de pequeña cilindrada, generalmente tricilíndricos, acompañados de un turbo.
Mazda nunca ha tenido un puesto destacable en el ranking de ventas en el mercado español. Motivos para conseguirlo no le faltan. Aún así, las marcas europeas, sobre todo francesas, alemanas e italianas se llevan la mayor parte del pastel entre los utilitarios.
Diseño
Con 4,06 metros de longitud, el Mazda 2 es 14 centímetros más largo que su antecesor. Las nuevas medidas, le sitúan como uno de los más grandes de su categoría, algo que no aparenta. El aumento de la batalla ha conseguido una mejora en el espacio interior.
Solo podemos adquirir este urbano en la configuración de cinco puertas. Esto supone una diferencia con la mayoría de sus rivales, como el Seat Ibiza o el Opel Corsa, disponibles también con tres puertas en sus catálogos.
La parte frontal recuerda mucho a la del Mazda 3 pero más pequeño, con una línea cromada que cruza la parrilla, tan característica de la marca japonesa. Los faros delanteros también recuerdan al resto de la gama, con un diseño afilado y una imagen muy deportiva.
Sigue siendo un vehículo con formas muy redondeadas, diferente a las nuevas tendencias del segmento, donde están sacando coches más anchos y bajos como el nuevo Polo; utilitarios que cada vez más se parecen a sus hermanos mayores del segmento C.
La parte trasera ha sido rediseñada para otorgar al Mazda 2 más sensación de anchura. Aun así, con 1,69 metros, no está entre los más anchos del segmento. Sus líneas limpias y redondeadas en esta parte han mejorado la estética con el modelo anterior, aunque sus formas restan espacio en la zona de carga.
La apariencia general del pequeño japonés es muy premium, con un nivel de terminación al alcance de muy pocos en su segmento.
Interior
Las recientes incorporaciones al mercado, como los nuevos Volkswagen Polo o el Seat Ibiza, han puesto más alto el listón en lo que a espacio interior se refiere. El Hyundai i20 ya demostró que se puede tener un coche espacioso en cuatro metros, y al resto no les ha quedado otra que mejorar sus diseños.
En las plazas delanteras no tendremos problemas para sentirnos a gusto desde el primer momento, con unos reglajes suficientes para encontrar una buena postura, independientemente de la estatura.
Con un diseño puramente minimalista, el Mazda 2 tiene unas formas tan originales como funcionales. Cuenta con una pantalla multifunción táctil, bien colocada, y desde donde se controlan la mayor parte de funciones. En cambio, para el sistema de climatización, la marca japonesa ha optado por las ruletas convencionales. Bajo nuestro punto de vista, es el sistema más cómodo que hay.
En las plazas traseras, el espacio para las piernas es algo justo. Dos personas viajarán cómodas, pero la anchura disponible a la altura de los hombros no lo hace aconsejable para que se acomoden tres adultos en estas plazas. No posee salidas de ventilación. pero todos los materiales aquí dan sensación de robustez y durabilidad. Un Hyundai i20 tiene mucho mejor resuelto este espacio.
En el maletero nos ocurre algo parecido a las plazas traseras: cumplen, pero no destacan. Con 280 litros de capacidad, se encuentra ligeramente por debajo de la media, y aunque tiene formas regulares, nos costará acomodar el equipaje de cuatro personas.
Dinámica
Aquí es donde el Mazda 2 puede sacar pecho frente a la mayoría de sus rivales. El buen trabajo con la suspensión y la insonorización hacen que sea un coche muy cómodo y estable en carreteras rápidas. Tiene una estabilidad digna de todo un compacto.
En carreteras de curvas también cumple con creces. Cambia de dirección con rapidez y, salvo que nos pasemos con el ritmo, donde aparece un ligero subviraje, el coche se comportará con mucha neutralidad y con movimientos muy predecibles. La diversión no está vetada con un urbano para Mazda.
Motor
Aquí es donde encontramos las mayores diferencias respecto a sus competidores. Mazda parece convencida de que prescindir del turbo es el camino, y hasta el momento es difícil quitarles la razón. Con un nivel de compresión muy elevado, cilindradas generosas y un sin fin de mejoras internas para minimizar fricciones, han conseguido motores muy agradables de conducir y con unos buenos niveles de potencia y consumo. Por todo ello, la marca llega sobrada al nivel de los mejores.
La marca ha puesto toda la responsabilidad en un bloque de 1,5 litros. Este, se ofrece configurable con tres niveles de potencia: 75, 90 y 115 CV. Desde la primera a la última la podemos considerar buena elección, ya que desde el de 75 CV conseguimos unas prestaciones muy dignas: pasa de 0 a 100 km/h en 12,1 segundos y tiene una velocidad máxima de 171 km/h. En todas sus versiones muestra unos datos muy buenos para su potencia.
Nuestra elección sería la variante de 90 CV de potencia, ya que aúna magníficas prestaciones con un consumo muy moderado. Pasa de 0 a 100 km/h en 9,4 segundos, al nivel de modelos con 20 CV más.
Precios
Parte de los 13.250 € de la versión Pulse con 75 CV y va hasta los 18.400 € del acabado más lujoso llamado Luxury, con cambio automático y el potente motor de 115 CV. Son precios plenamente competentes para todo lo que ofrece este Mazda 2.
Conclusión
La marca japonesa ofrece un producto con un nivel de fabricación al nivel de los mejores y una estética rompedora. Además, la fiabilidad de sus motores atmosféricos de gasolina está más que contrastada.
No es el mejor en habitabilidad interior, pero lo compensa con creces en otros apartados. Solo probando este Mazda 2 podrás apreciar sus virtudes respecto a la mayoría de sus rivales. Su conjunto cambios-motor te enamorará.