Tres tecnologías eficientes de los motores actuales
Los adelantos y las innovaciones tecnológicas están en evolución permanente. Ingenieros, diseñadores y empresarios están siempre tras la búsqueda de nuevas posibilidades que permitan optimizar los procesos y abaratar costes. Dentro de esta carrera, la industria automotriz es una de las que más rápido avanza. ¿Cuáles son las tecnologías eficientes de los motores actuales?
Planeta verde
Además de calidad, rendimiento, durabilidad y economía, los nuevos desarrollos también deben garantizar ser amigables con el medio ambiente. Salvo excepciones, la mayoría de los países a nivel mundial se están tomando en serio los compromisos de disminuir la emisión de gases contaminantes.
Todo parece apuntar que, para construir vehículos con tecnologías verdes, se debe prescindir de los combustibles fósiles. Por ello, muchas de las investigaciones actuales están centradas en construir coches no solo híbridos, sino totalmente eléctricos.
Sin embargo, algunas de las tecnologías eficientes de los motores actuales, demuestran que la gasolina y el diésel tienen margen para seguir creciendo. También para desarrollar prototipos cada vez menos nocivos para la salud del globo terráqueo.
Encendido por compresión (HCCI)
Estas tecnologías eficientes de los motores actuales han estado rondando la industria del motor durante muchos años. En 2018 dará su salto definitivo a la producción en masas debajo del capó de la tercera generación del Mazda3.
Los motores de encendido por compresión (HCCI, por sus siglas en inglés) combinan características de los modelos “tradicionales” de gasolina y diésel. De los primeros toman la carga homogénea con el encendido por chispa, de los segundos, la carga estratificada con el encendido por compresión. Dentro de toda esta ecuación, prescinden de un elemento que había estado por décadas presente: las bujías.
El resultado: una máquina hasta 30% más eficiente en comparación con los modelos a gasolina tradicionales. Adicionalmente, la emisión de gases contaminantes es considerablemente menor.
Los motores HCCI funcionan con gasolina y diésel. De igual forma, con la mayoría de los combustibles alternativos como el etanol, gas natural y Biodiesel.
Sistemas turbo o sobrealimentados
A la hora de ofrecer potencia, los motores turbo suelen estar por encima de los demás.
Junto con la búsqueda de más poder, el “downsing” también se ha hecho presente dentro de las tecnologías eficientes de los motores actuales. Esta herramienta persigue la obtención de máquinas más pequeñas y que a su vez garanticen mayor rendimiento, menos consumo y emisión reducida de gases contaminantes.
Dentro de las opciones turbo, el modelo más destacable habita dentro del Ferrari 488 GTB, incluida su versión descapotable conocida como el 488 Spider.
Esta máquina construida enteramente en aluminio, es sobrealimentada por dos turbocompresores paralelos de turbinas centrífugas (twin-scroll). El Ferrari 3.9 biturbo V8, fue reconocido como Motor del Año en 2016 y repitió en 2017. Una apuesta segura que no está al alcance de todos los bolsillos.
De igual forma, destaca dentro de este segmento un motor que añade un componente tecnológico extra: el sistema híbrido. Este es el BMW i8.
Se trata de una máquina de 1.5 litros de capacidad, con tres cilindros turbo. Con la batería a plena carga, cuenta con una potencia de 224 Caballos de Fuerza, capaz de desarrollar velocidades superiores a los 200 kilómetros por hora.
Tecnologías eficientes de los motores actuales: Star/Stop a altas velocidades
Se trata de otra de las tecnologías eficientes de los motores actuales. Los sistemas Star/Stop no son tan recientes como cabría suponer.; el primer coche en portar esta tecnología fue el Fiat Regata ES, que salió al mercado en 1982.
Casi 40 años después, el reto para las casas automotrices es implementar este mecanismo más allá del ámbito común.
La tecnología Star/Stop fue desarrollada originalmente con el propósito de parar el motor de forma automática cuando el vehículo está detenido o se desplaza a velocidades muy bajas. De la misma manera, lo activa cuando al mínimo estímulo que indique que se puede reiniciar la marcha. La premisa básica: disminuir la emisión de gases tóxicos durante los grandes atascos urbanos.
Hoy día, una mejora inaugurada dentro del Volkswagen Golf 1.5 Bluemotion, permite dejar el motor en “modo vela” durante desplazamientos a altas velocidades que no demanden grandes despliegues de potencia.
En resumidas cuentas, el vehículo se desplaza por inercia siempre que las condiciones de la vía lo permitan. La máquina se reactivará automáticamente con el primer estimulo del conductor. Esto puede ocurrir una vez que se pise el pedal del acelerador o el del freno.